Especial
A 40 años del asesinato del Che Guevara
18/10/2007
PARTE I
El próximo 8 y 9 de octubre se cumplirán los 40 años de la caída en combate del Comandante Ernesto Che Guevara en la selva del Ñancahuazu, Bolivia. Asesinado por orden del dictador Barrientos, instigado por los EE.UU., culminaba trágicamente el intento de extender la revolución en América Latina mediante la instalación de un foco guerrillero. Por haber dado su vida como combatiente, el Che Guevara es uno de los máximos referentes de la juventud y los luchadores sociales de América Latina y buena parte del mundo.
Los capitalistas buscan transformar al Che en un producto mercantil vendible, en posters y remeras. Programas como “El Gen argentino”, lo transforman en figura mediática para obtener rating. Pero también, el emblema del Che es utilizado por reformistas y burócratas de toda especie, para cubrir sus capitulaciones políticas frente a la burguesía. El objetivo es despolitizar y vaciar de contenido ideológico al Che para presentarlo como un ícono inofensivo.
Los socialistas revolucionarios, trotskistas, consideramos al Che Guevara como el máximo exponente de la concepción guerrillerista que buscó llevar adelante la revolución social en América Latina mediante la construcción de partidos-ejércitos guerrilleros de base campesina. Y como tal nos interesa someter a crítica las concepciones políticas y estratégicas del Che recuperándolo de la utilización mercantil y oportunista que del mismo hacen la burguesía y los reformistas, pero también clarificando las diferencias en pos de extraer lecciones que sirvan para preparar los combates de clase por la revolución y el socialismo internacional en este nuevo siglo que nos toca por vivir.
– Dos concepciones frente a la revolución latinoamericana
– La prueba de Cuba y el dogma de la “revolución por etapas”