Compañeras y compañeros:

La V Conferencia de la Fracción Trotskista - Cuarta Internacional ha discutido esta semana con el telón de fondo del agravamiento de una crisis capitalista que no es simplemente estadounidense sino internacional. Vean sino compañeros lo que dice un artículo del diario El País del Estado Español:

“La mala sombra de la recesión se alarga de manera imparable desde Estados Unidos hacia Europa. Los políticos se han vuelto cautos y han renunciado ya a fijar una fecha para la recuperación económica. Hay que ir olvidando que el buen tiempo llegaría en la segunda mitad de 2009. La tormenta financiera provocada por las hipotecas de alto riesgo que estalló en agosto pasado en Estados Unidos ha contagiado también a numerosos bancos europeos y empieza a afectar a la economía real. Nadie se atreve a pronosticar hasta dónde se hundirá el barco” (El País, 25-07-08).

Atrás han quedado los tiempos en que se pronosticaba que la crisis estaría limitada a un sector particular y que el conjunto de la economía no sería afectada.

Desde que comenzó la crisis los paises imperialistas ya invirtieron centenares de miles de millones de dólares para evitar quiebras bancarias y de inversionistas. Ha pasado el momento en el que los voceros de los capitalistas cantaban loas a la no intervención estatal. Hoy imploran que los estados gasten sumas multimillonarias en salvar del quebranto a los especuladores mientras recortan los gastos sociales y atacan al movimiento obrero. El capitalismo se muestra una vez más ante los ojos de millones como un sistema que socializa las pérdidas y privatiza las ganancias.

Los últimos salvatajes fueron los realizados por la Reserva Federal norteamericana hace menos de 15 días con el banco centrado en operaciones inmobiliarias Indy Mac, que pasó a estar controlado por autoridades federales, y las compañías hipotecarias Fanny Mae y Freddy Mac, que tienen entre ambas la mitad del mercado estadounidense para la compra de vivienda y el 75% de las hipotecas sobre las casas unifamiliares. Para que se tenga una idea de del peso que tienen estas firmas poseen una porción considerable de los 5,2 billones de dólares en títulos de deuda respaldados por estos dos gigantes. 10 veces la deuda externa de América Latina. En Norteamérica sólo hay un deudor mayor: el Tesoro de EE.UU.

En el sector inmobiliario la crisis ya ha llevado a que las expulsiones por embargos forzosos de las viviendas sean un 57% superiores a las del año pasado. Y es un 129% mayor la cantidad de inmuebles que cayó en manos de los bancos y empresas financieras hipotecarias debido a la falta de pago. Actualmente hay en EE.UU. millones de viviendas vacías:

Ya se cuentan por miles los que perdieron sus casas y viven arriba de sus autos, incluso trabajadores de oficina y con ingresos relativamente altos.

Pero no son sólo las finanzas y el sector inmobiliario. La crisis afecta al conjunto de la economía estadounidense y en particular a la industria automotriz, donde los grandes monopolios que la controlan como Ford, Chrysler y General Motors están sufriendo grandes pérdidas y anuncian miles de despidos. Ford, por ejemplo, anunció ayer que en el último trimestre tuvo pérdidas por 8700 millones de dólares.
Ya los compañeros del Estado Español se refirieron a cómo la crisis se expresa en el país ibérico. Y en Gran Bretaña la política de ajuste del gobierno de Gordon Brown para enfrentar la crisis está llevando a importantes huelgas, como no se veían desde antes que Margaret Thatcher impusiera un fuerte derrota a los trabajadores británicos.

Esta crisis se ha expresado hasta el momento en forma desigual. Hay paises como EEUU, Gran Bretaña y el Estado Español que estan ya viviendo o van en camino a una profunda recesión, mientras que en otros paises todavia se mantiene un crecimiento importante. Las materias primas han tenido de conjunto un aumento muy importante, en parte por negocios especulativos. Creando una presión al aumento inflacionario en todo el mundo y llevando a rebeliones del hambre en los paises importadores de alimentos. Pero hay que tener en mente que es probable que en los proximos meses veamos generalizarce la recesión. EE.UU. ha venido siendo en base a un gran endeudamiento tanto del Estado como de los consumidores particulares el gran comprador mundial. ¿Cómo no esperar que el conjunto de la economía internacional sea afectada por una crisis que surge en el corazón del capitalismo contemporáneo? ¿Quién comprará las exportaciones chinas?

Compañeros: nosotros no somos adivinos para predecir los ritmos exactos ni los alcances finales que tendrá la crisis en curso. Pero lo que ya hoy sabemos y hemos discutido en la conferencia es que estamos frente a una crisis de alcance muy superior a las que vimos en los últimos años. Estamos frente a nuevas y grandes turbulencias económicas y políticas, que desmienten a quienes se imaginaban que la restauración capitalista en la ex Unión Sovietica y China, junto a los ataques neoliberales a la clase obrera habian creado condiciones para el desarrollo de un nuevo ciclo largo de crecimiento capitalista como el que se dio despues de la segunda guerra mundial. El capitalismo se sostuvo en estos años pero a costa de incubar nuevas y mayores contradicciones que hoy estan estallando. El sistema no puede evitar su tendencia a catástrofes recurrentes. Y la que estamos viviendo amenaza con ser la más importante desde 1929. Muchos de los aquí presentes recordarán el crack de la economía argentina en el 2001. Imaginen sus consecuencias de darse una situación similar en la principal economía mundial, como muchos predicen, aunque este país tratará de descargar la crisis sobre los pueblos y los trabajadores de todo el mundo.

Hoy la crisis económica es el elemento más dinámico que está quebrantando el equilibrio capitalista de los últimos años y empujando a mayores disputas interestatales y a mayores enfrentamientos de clases. La FT de conjunto tiene que prepararse para intervenir en este nuevo escenario más convulsivo. Los levantamientos, revueltas con decenas de muertos por el hambre en mas de 30 paises pobres, provocado por el aumento de los alimentos, es solo el preanuncio de la catastrofe que se avecina sobre los mas desposeidos de la tierra y tambien es la muestra que el movimiento de masas va a resistir frente a esta barbarie. Mientras que millones no tienen hoy que comer, aunque la producción de alimentos duplica lo necesario para satisfacer las necesidades de la población mundial, los monopolios alimenticios se enriquecen como nunca. Hay que luchar por la expropiación de esos monopolios expoliadores de la clase obrera.

Junto a la crisis económica, estamos viviendo el fin de la era Bush, que lejos de cumplir el objetivo neoconservador de asegurar “un nuevo siglo americano” ha provocado un aumento en la decadencia de la hegemonía estadounidense, con el empantanamiento de su política en Irak, la continuidad de las convulsiones políticas en Medio Oriente y la continuidad de la guerra en Afganistán.

Pero este debilitamiento no quiere decir que el imperialismo no va a tomar nuevas medias de agresión militar contra los pueblos del mundo. Va a negociar con algunos pero ya se esta preparando para aumentar sus contingentes opresores como en Afganistan. Por eso en este acto queremos gritar bien fuerte: Fuera las tropas imperialistas de Irak, Afganistan y todo Medio Oriente. Viva la resistencia del pueblo palestino contra el Estado de Israel y el imperialismo.

El hecho simbólico que EE.UU. tenga que recurrir posiblemente como próximo presidente a un afro americano como Barack Obama, para tratar de hacerce una imagen de cambio y contener las expectativas de millones que quieren temrinar con la epoca de Bush en EEUU y en el resto del mundo es expresión de la profunda decadencia del imperialismo norteamericano. Hace dos días fue recibido por una multitud en Berlín. Sin embargo, nada bueno pueden esperar los trabajadores y los pueblos del mundo del candidato demócrata. Más allá de los discursos de campaña, es un hombre que Wall Street considera claramente confiable para sus intereses. Aún antes de triunfar Obama ha tomado como propia gran parte de la agenda en política exterior de Bush, como el apoyo a Israel contra el pueblo palestino y las amenazas contra Irán y el apoyo al Plan Colombia.

En todo el mundo la clase trabajadora debe prepararse para nuevos ataques mediante los cuales los capitalistas querrán descargar la crisis sobre sus hombros. En los últimos años la clase obrera se fortaleció socialmente y ha mostrado en distintos sectores una renovada capacidad de lucha en el terreno económico, como expresaron muchos de los compañeros que me precedieron en el uso de la palabra. Y como tambien se ha dado, por nombrar solo algunos paises, en Vietnam, en Egipto, en Polonia. Y tambien esta mostrando el despertar de ese nuevo coloso, todavia medio dormido, que es la clase obrera china. Hoy ya no debemos explicar que la clase obrera existe y lucha, como ocurría en los ’90 cuando florecían las teorías sobre el “fin del trabajo”. Pero esta relativa recomposición de la acción sindical de los trabajadores no sginifica que hayan sido revertidas las profundas derrotas sufridas bajo el neoliberalismo ni que lo que hemos llamado la subjetividad de la clase trabajadora, su capacidad de organización sindical y política independiente, siga siendo extremadamente baja.

Los marxistas revolucionarios somos hoy una pequeña minoría, en medio de centenares de millones de trabajadores que descreen de la posibilidad de superación de este sistema de explotación y, a lo sumo, piensan en una utópica humanización del capitalismo o en organizarse a nivel sindical. En estos años, la resistencia social a las políticas neoliberales dio lugar, no a un resurgir del marxismo revolucionario o aún de fuertes partidos de la clase obrera sino a diverso tipo de movimientos que van desde tibios reformismos hasta el renacimiento de corrientes como el autonomismo que sostenian que era posible cambiar el mundo sin tomar el poder y que en parte nos volvieron a plantear a los marxistas discusiones teoricas y estrategicas parecidas a las que ya hacian Marx y Engels en el Manifiesto Comunista contra los socialistas y comunistas utópicos. El movimiento antiglobalización, que surgió en Seattle en 1999, fue un claro muestrario de todas estas tendencias.

En nuestro continente se fortalecieron distintas variantes populistas, que lograron canalizar el descontento expresado Las organizaciones que formamos parte de la FT decimos con claridad que es preciso en las grandes rebeliones populares que tuvieron lugar los primeros años del siglo. Gran parte de la izquierda mundial ha cedido frente a estos fenómenos y ha postulado que la tarea de construir partidos revolucionarios que luchen por la revolución obrera y socialista fue superada por la historia.

Incluso sectores provenientes del trotskismo sostuvieron que era hora de construir “frentes antineoliberales” o partidos sin anclaje en la clase obrera y sin delimitación estratégica entre reformistas y revolucionarios. Lo que ocurrió con Refundación Comunista de Italia, el partido presentado como ejemplo de esta estrategia, muestra que adonde conduce esta política. Refundación se integró al gobierno antiobrero y proimperialista de Prodi, perdió a su ala izquierda y se quedó sin representación parlamentaria.

En Brasil, el Partido Socialismo y Libertad, encabezado por Heloisa Helena es un mero acuerdo electoral de conveniencia, una cáscara vacía de militancia con un programa desarrollista burgués, a la medida de sus acuerdos con políticos arribistas de distinta índole, que no defiende la independencia de clase. En Venezuela, distintos sectores trotskistas son parte de un mismo partido con empresarios y militares, el PSUV chavista. ¡Qué curioso que organizaciones que son fanáticamente chavistas en Venezuela, como el MST argentina han terminado como furgón de cola de los “escuálidos” argentinos apoyando a las patronales agrarias en el conflicto reciente!

No son organizaciones de este tipo las que necesita la clase obrera, sino verdaderos partidos revolucionarios de combate. No es posible construir estas organizaciones solamente interviniendo en las luchas cotidianas. Junto con esto tenemos planteada una fuerte pelea en el terreno teórico e ideológico si es que queremos ganar a nuevos sectores de la vanguardia obrera, estudiantil y de la intelectualidad para la perspectiva revolucionaria. Y tambien tenemos planteado participar en todos los procesos en que la clase obrera de aunque sea un paso adelante en el terreno de conquistar su independencia de clase.

Las organizaciones que formamos parte de la FT decimos con claridad que es preciso luchar por partidos que tengan un claro programa revolucionario y, en este sentido, compartimos la pelea que plantean los compañeros del CRI en Francia de dar una pelea por una estrategia de este tipo en el proceso de constitución del Nuevo Partido Anticapitalista llamado por la LCR de Olivier Besancenot, cuya dirección, como venimos denunciando desde la revista Estrategia Internacional, quiere formar un partido que no luche por el poder obrero ni el socialismo.

Hace poco menos de 70 años, un 3 de septiembre de 1938, una conferencia reunida clandestinamente en París daba lugar a la fundación de la IV Internacional, cuyo texto central es el llamado Programa de Transición, del cual acabamos de publicar una nueva edición. El mismo día Trotsky se enteraba que el Partido Comunista mexicano había decidido pasar a la acción contra su vida, algo en lo que tendría éxito dos años más tarde. Rudolf Klément, quien había organizado la conferencia, había sido asesinado previamente por los stalinistas.

Trotsky, poco antes de su asesinato escribía que “Entre las vastas extensiones de tierras y las maravillas de la tecnología, que además de la tierra conquistó los cielos para el hombre, la burguesía logró convertir nuestro planeta en una sucia prisión”. ¡Vaya si estas palabras mantienen actualidad! Justamente el otro día leía un texto de un famoso pintor, poeta y escritor británico, John Berger, que decía que si tenía que graficar con algún término al mundo contemporáneo este era el de la prisión, con el recrearse de los muros y los campos de encierro de los inmigrantes y la militarización de la vida en las grandes ciudades con la criminalización creciente de la pobreza y la miseria, donde millones de trabajadores brutalmente explotados son reducidos al estatus de criminales.

Trotsky escribía aquellas líneas frente al estallido de la Segunda Guerra Mundial. Nosotros no estamos hoy frente a la perspectiva de una guerra semejante, entre otras cuestiones porque no existe en lo inmediato una potencia que se postule como recambio imperialista del alicaído poder estadounidense. Pero, como señalamos al comienzo de estas palabras, estamos viviendo una crisis económica de gran envergadura que tendrá, ya está teniendo, efectos catastróficos sobre las condiciones de vida de los trabajadores y el conjunto de las masas explotadas. Ya en años anteriores vimos como en circunstancias de crisis parte del programa transicional ganaba renovada actualidad al ser tomado por los trabajadores en lucha, como vimos por ejemplo en la ocupación y puesta a producir de Zanon bajo gestión obrera y en otras fábricas ocupadas. Lo mismo vimos reproducirse en Venezuela con la lucha de Sanitarios Maracay. Y en este mismo país la lucha obrera llevó a la nacionalización de SIDOR, la empresa controlada por el grupo Techint. Aquí en Argentina vimos también surgir organizaciones militantes de desocupados que, más allá de sus límites, expresaron la resistencia al flagelo de la desocupación de masas y evitaron que quienes eran expulsados de sus empleos fueran utilizados por la burguesía como rompehuelgas. Huelgas, ocupaciones de fábricas, levantamientos del hambre, insurrecciones locales, cortes de rutas: estas y otras formas de la lucha de clases veremos desarrollarse frente a la crisis. Para enfrentarla, la clase obrera tendrá que recurrir a métodos cada vez más radicalizados. Tenemos profunda confianza que en esta experiencia el programa trotskista se hará carne nuevamente en sectores de las masas y podrá mostrar una alternativa al conjunto de los explotados. Que permita hacer realidad la expropiación de los exproapiadores, que es el único camino para terminar con la barbarie capitalista.

Que estas luchas se den no depende de nosotros. Pero lo que sí está a nuestro alcance es forjar los dirigentes, cuadros y militantes que puedan confluir con lo mejor que de la vanguardia obrera, juvenil, intelectuales y estudiantes para avanzar en la construcción de partidos y una internacional revolucionarios. En este camino, saludamos la incorporacion como sección de Costa Rica de la FT de los compañeros de la Liga de la Revolución Socialista, y a su vez, como planteó el compañero Stephane, también queremos saludar el acuerdo para integrarse como sección simpatizante en Francia de los compañeros del grupo CRI. En un marco donde a la vez que desarrollaremos una internvecion comun en base a los acuerdos programáticos y politicos que tenemos, abordaremos algunos importantes temas en los que aun no tenemos acuerdo.

Para terminar en la conferencia planteamos tres tipos de tareas para todas las organizaciones de la FT:

– i Profundizar la formación teórica y política de nuestras organizaciones, batallando por recrear un marxismo vivo, que dé respuestas a los desafíos que nos plantea la realidad y discuta con las principales teorías elaboradas por las clases dominantes y por los reformistas de distinto tipo.

– ii Continuar con nuestro desarrollo en el seno del movimiento obrero de nuestras organizaciones. Una tarea que no sólo enfrenta las persecusiones de las patronales y la burocracia sindicale, sino que lamentablemente ha sido dejada de lado por gran parte de la izquierda. Y esto compañeros es crucial porque frente al desgaste de los gobiernos nacionalistas o populistas estamos ante al fortalecimietno de tendencias de derecha completamente reaccionarias. Y si no construimos una alternativa de independencia de clase, ese descontento va a ser canalizado por esas variantes reaccionarias y la clase obrera va a sufrir nuevos golpes sobre sus espaldas.

– iii Nos hemos planteado redoblar la lucha por partidos revolucionarios y por la reconstrucción de la Cuarta Internacional. Sabemos que esta tarea es difícil y que no será de ninguna manera el resultado de una evolución de nuestra organización sino el producto de fusiones y convergencias con sectores de otras tendencias con los que podamos confluir en el curso de la lucha de clases. En el mismo sentido que señaló mi compañero, José Montes, en el terreno nacional para el PTS insistimos en el llamado para realizar campañas comunes y un reagrupamiento progresivo por la reconstrucción de la IV Internacional a las organizaciones que plantean lucha por la revolución obrera y socialista tal objetivo, como la Liga Internacional de Trabajadores, dirigida por el PSTU brasileño, y la CRCI, encabezada por el PO argentino.

Proponemos cerrar este acto con las consignas que van a plantear las principales campañas que hemos discutido en la conferencia de la FT-CI:

– Fuera las tropas brasileñas, argentinas, uruguayas y chilenas y bolivianas de Haití!

– Abajo la directiva del retorno y todas las leyes antiinmigrantes y xenófobas de la UE!

– Apoyo a la lucha de Zanon bajo control obrero por su expropiación definitiva!

– Y finalmente, realizar una campaña por la reconstrucción de la IV Internacional a 70 años de su fundación.

¡Viva la clase obrera mundial!

¡Viva la IV Internacional, el Partido Mundial de la Revolución Social!