Reforma Ministerial
Brasil: ¿Dónde está la derecha?
26/11/2014
A pesar de la campaña del PT sobre un supuesto “golpe de la derecha” contra el nuevo mandato presidencial de Dilma Rousseff, la realidad es que la derecha viene fortaleciéndose dentro del propio gobierno, por lo que hay que buscar una salida independiente.
El PT viene llevando adelante en las redes sociales, en la blogosfera y en las revistas de centroizquierda una ruidosa campaña sobre lo que denominan “tercer turno”. Éste sería un supuesto intento de las fuerzas opositoras de derecha y sus tentáculos en el Poder Judicial de encontrar motivos legales para un impeachment (destitución) de Dilma a través de relacionar de alguna manera su campaña con el escándalo de Petrobrás.
Dicha campaña busca darle brillos más “catastróficos”, una supuesta amenaza “golpista” que ni siquera sería por medios legales, apoyándose en las manifestaciones de sectores de la derecha que salieron a las calles de San Pablo pidiendo no solo “Fuera PT” sino también una intervención militar. Lograron reunir unos pocos miles de adeptos, muchos que no tienen acuerdo con la apología al golpe y algo más de simpatizantes en las redes sociales.
Recientemente el ideólogo petista Mino Carta, editor del semanario [Carta Capital-http://www.cartacapital.com.br/], hizo un paralelo entre Brasil e Italia para argumentar los riesgos en juego. Después de rescatar la trayectoria del Partido Comunista italiano, que en la década del 90 luego de su envolvimiento en voluptuosos escándalos de corrupción, entró en franca decadencia, ese país vio el ascenso del magnate derechista Silvio Berlusconi.
Es decir, para los “formadores de opinión” del PT, ese sería el mensaje: tengan cuidado con la justicia en la investigación de los escándalos de Petrobrás, porque puede traer al PSDB de vuelta al poder. Parece difícil digerir, pero no es ni más ni menos que eso: se trata de una versión “de izquierda” del “roba pero hace” de Paulo Maluf, quien fue gobernador durante la dictadura y actualmente es buscado por la Interpol por casos de corrupción su intendencia en la ciudad de San Pablo, y que dicho sea de paso se trasformó en un aliado de primer orden del PT en esa ciudad.
Mientras tanto...
Kátia Abreu, conocida como una de las más reaccionarias representantes del agronegocio, es elegida para dirigir el Ministerio de Agricultura. Joaquim Levy, reconocido representante de los bancos y del mercado financiero, sospechado de haber aconsejado a Armínio Fraga en las tesis del ajuste fiscal del programa del ex candidato por el PSDB Aécio Neves, es elegido para dirigir el Ministerio de Economía. Armando Monteiro, ex presidente de la Confederación Nacional de las Industrias, es elegido para dirigir el Ministerio de Desenvolvimiento.
Mientras todo el mercado esperaba que Dilma mantuviese las tasas de interés más o menos estables, la nueva presidenta comenzó una nueva ruta de elevación, sorprendiendo incluso a los banqueros que más ganan con eso. Frente a una situación de creciente deterioro de las cuentas públicas, el ministro de Economía en fase despido, Guido Mantega, hizo incontables promesas de que los próximos años serán de duros recortes de gastos.
Con una “izquierda” así, quién necesita una derecha?
Para o desgosto dos ideólogos petistas, os líderes tucanos se colocaram contrários ás manifestações pró-impeachment e pró-golpe. Também para a tristeza dos blogueiros “da esquerda”, o grande monstro chamado “mercado” comemorou com entusiasmo as escolhas dos novos ministros. As ações na Bolsa se valorizaram; o real se valorizou.
Si por un lado Aécio Neves hace distursos pretensamente rabiosos en el senado exigiendo la investigación del escándalo de Petrobrás y prometiendo una oposición “dura”, por otro lado los gobernadores tucanos inician una “agenda de diálogo” con el gobierno federal y el PSDB sella un acuerdo con el PT en la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) de Petrobrás, donde representantes de ambos partidos serán eximidos de declarar.
As empreiteiras que estão no banco dos réus do escândalo da Petrobrás são as maiores financiadoras das campanhas eleitorais tanto do PT como do PSDB. Se é verdade que o esquema ganhou uma dimensão superior nos governos do PT, já se sabe que o mesmo começou no mandato de FHC.
Las constructoras que están en el banquillo de acusados del escándalo de Petrobrás son las mayores financiadoras de las campañas electorales tanto del PT como del PSDB. Si es verdad que el esquema ganó una dimensión superior en los gobierno del PT, ya se sabe que el mismo comenzó en el mandato del ex presidente tucano Fernando Henrique Cardoso (FHC).
¿Una reforma política de izquierda?
La principal promesa de Dilma en sus primeros discursos después de las elecciones fu el de hacer una reforma del sistema político a través de un plebiscito. Luego después, al haber sido derrotada por su principal aliado, el PMDB, en distintas votaciones en el Congreso, decidió negociar con ese partido lo que sería esa reforma.
É possível que o PT queira vender uma eventual reforma política acordada com o PMDB como uma medida “progressista” que pudesse “compensar” ou encobrir a política econômica de direita que já começou a ser implementada. Entretanto, a pergunta que os petistas terão que responder é: como será possível uma reforma progressista do sistema político com ninguém menos que o PMDB de José Sarney e Renan Calheiros?
Es posible que el PT quiera vender una eventual reforma política acordada con el PMDB como una medida “progresista” que pudiese “compensar” o encubrir la política económica de derecha que ya comenzó a ser implementada. Sin embargo, la pregnta que los petistas tendrán que responder es: cómo será posible una reforma progresista del sistema político con el PMDB de José Sarney y Renan Calheiros, cuyas trayectorias políticas incluyen la participación en el bipartidismo de la dictadura militar.
¿Qué izquierda puede combatir a la derecha?
Los blogueros materialmente dependientes del Planalto, sede del ejecutivo brasilero, salieron a defender la reforma ministerial con el argumento de que un ministerio debe representar a todos los “sectores sociales” y que Dilma sigue “mandando”. Los movimientos sociales, que convencieron a sus bases de votar a Dilma con la promesa de que sería un nuevo gobierno más de izquierda que el anterior, se están viendo obligados a protestar.
El MST llegó a realizar ocupaciones en protesta por el nombramiento de Kátia Abreu, pero los blogueros ya dieron la justificación para calmar las aguas: será elegido un izquierdista para el ministerio de desarrollo agrario, que fue creado justamente para acomodar dentro del mismo gobierno los intereses del agronegocio y de los movimienots sociales. El único problema es que, en este acomodo, unos han ganado mucho más que otros.
Como tienen cierta dificultad para entusiasmar a la gente con las nuevas medidas del gobierno en el área económica, la Central Ìnica de Trabajadores (CUT), el Movimiento Sin Tierra (MST) y la Unión Nacional de Estudiantes (UNE), con la ayuda del PSOL y el Movimiento de Trabajadores Sin Techo (MTST) impulsan un movimiento por la reforma del sistema político más a la izquierda de la que el gobierno articula con el PMDB. Ese movimiento ocupó la Avenida Paulista como una demostración de fuerzas opuesta a los actos de la derecha, y se pronunció abiertamente en defensa de la “gobernabilidad” del nuevo mandato de Dilma “contra la derecha” y no dijo una sola palabra sobre la falta de agua que alcanza a la población paulistana.
Estos son los dilemas que la denominada “izquierda” le plantea a los trabajadores y la juventud en Brasil: cuidado con la investigación del escándalo de Petrobras, porque si el PT queda demasiado metido, el PSDB podrá verse electoralmente beneficiado; defendamos una reforma del sistema político al mismo tiempo que sostenemos al gobierno que no quiere ninguna reforma que pueda poner en riesgo su alianza con el PMDB; y defendamos cambios económicos y sociales favorables a los trabajadores a la vez que sostenemos un gobierno que atiende las exigencias de la patronal ante la crisis.
Si es posible luchar seriamente en defensa de las demandas del pueblo contra los ataques que están por venir y contra el fortalecimiento de la derecha es a través de la organización y de la movilización de los trabajadores y la juventud en forma independiente del gobierno. Respondiendo a esa necesidad, el Movimiento Nuestra Clase, que reúne a trabajadores que estuvieron en la línea de frente de las huelgas que sacudieron al país en el último año, vienen haciendo un llamado a los sindicatos y oposiciones sindicales que se ubican con independencia del gobierno y la patronal, a realizar un encuentro de trabajadores de base para preparar las próximas batallas.