La tragedia haitiana
¡Fuera yanquis de Haití!
29/01/2010
Alegando ayuda humanitaria, EE.UU. ocupa Haití con el aval de la ONU. Junto a la banca internacional quieren profundizar la sumisión del país al imperialismo
A dos semanas del trágico terremoto han sido confirmadas cerca de 200.000 muertes, 250.000 heridos y más de 1 millón que quedaron sin casa (en un país de 10 millones de habitantes). El gobierno de Obama está llevando adelante una cínica campaña “humanitaria” consistente en el envío de 13.000 soldados, una flota de guerra y cientos de helicópteros con la excusa de “prevenir” desmanes y “asegurar” la entrega de alimentos y medicinas. En realidad, el objetivo es reprimir a la población desesperada y garantizar la continuidad de los negocios de la burguesía local y las multinacionales instaladas sobre todo en la frontera con República Dominicana donde sus trabajadores son semiesclavos, prácticamente sin derechos laborales ni sindicales.
Hipocresía imperialista
La capital Puerto Príncipe es un mar de desolación con millones de hambrientos vagando si lugar donde dormir. Más de 400.000 personas han sido evacuadas a campos de refugiados fuera de la ciudad y cientos de miles de niños se encuentran totalmente desamparados. Lejos de resolver los urgentes problemas del pueblo haitiano, las tropas norteamericanas han tomado el control del país y mientras entregan la “ayuda” a cuentagotas, exigen orden y calma a la población.
Frente a los cuestionamientos internacionales que recibió esta política, la secretaria de Estado Hillary Clinton declaró sentirse “profundamente disgustada con quienes agreden a la generosidad de nuestro pueblo y el liderazgo de nuestro presidente cuando tratamos de responder a la catastrófica situación sin precedente en Haití”.
Como se sabe, la actual tragedia viene a sumarse a la extrema pobreza estructural en la que está sumida el país (el más pobre del continente) desde hace décadas por la continua expoliación imperialista que ha llevado a que el 80% de la población viva bajo la línea de pobreza y no tenga trabajo. Desde 2004 el país se encuentra ocupado por la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah) integrada por Brasil, Uruguay, Chile, Argentina, Bolivia y otros. Estas tropas han protagonizado feroces represiones al pueblo haitiano y pesan sobre ellas denuncias de abusos y violaciones. Los gobiernos de Lula, Tabaré, Kirchner y demás “progresistas” son cómplices de la desesperada situación que atraviesa Haití.
En este marco, la nueva ocupación norteamericana escudada en una misión humanitaria, busca profundizar aún más la dominación imperialista. Por eso, Alejandro Wolff, embajador ante la ONU, aseguró que la presencia militar yanqui en Haití "será a largo plazo".
ONU: ¿“reconstrucción” del país o negocios capitalistas?
El 21 de enero el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el ex presidente de EE.UU. Bill Clinton, reunidos en Washington habían pedido "pasar de la ayuda de emergencia a la reconstrucción". Como si los problemas sanitarios y alimenticios estuvieran resueltos.
Posteriormente, en la reunión de la ONU por la reconstrucción de Haití que se realizó el lunes 26 en Montreal, Canadá, se informó que la tarea llevará unos “10 años de duro trabajo” y que contratarán 10.000 haitianos por un salario de hambre de 5 dólares diarios para llevarla a cabo. Cabe señalar que de la reunión participaron el Banco Mundial, el FMI y el Banco Interamericano de Desarrollo, quienes ni siquiera han condonado la deuda externa haitiana, que en las últimas décadas aumentó 40 veces (de 40 a 1600 millones de dólares) por seguir los planes económicos digitados por ellos mismos.
Curiosamente, la declaración salida de esta cumbre hace mención a la “soberanía” de Haití a la vez que destaca el rol “coordinador” de la ONU y las mencionadas entidades financieras en las tareas de reconstrucción. Nada bueno vendrá para el pueblo haitiano de la mano de Obama, la ONU y el FMI.
Sólo las organizaciones obreras y populares deben controlar la ayuda. Hay que poner en marcha una gran campaña internacionalista en solidaridad con el pueblo haitiano.
¡Fuera las tropas yanquis y de la Minustah!
¡No al pago de la deuda externa!
¡Que los capitalistas nacionales y extranjeros paguen el costo del desastre con sus ganancias!