CATALUÑA
Después del 9N: un laberinto de negociaciones
14/11/2014
Después de los resultados del 9N y las declaraciones de Rajoy, comenzaron los debates y movimientos entre el PP, Artur Mas, el PSOE y los partidos soberanistas. El 9-N dejó abierto un laberinto de negociaciones con difícil salida.
Después de la negativa del presidente Mariano Rajoy a entablar cualquier tipo de negociación desconociendo los resultados del 9N, Artur Mas se ha contactado con todos los partidos soberanistas y con el Partido Socialista de Catalunya (PSC) con el objetivo de empezar a fijar una hoja de ruta después del 9-N.
La primer constatación es la ruptura casi definitiva con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) respecto a los presupuestos catalanes del 2015 que conlleva un ajuste de 4.000 millones para alcanzar el objetivo del déficit; presupuestos que ERC sí había apoyado en el 2014.
Su líder Oriol Junqueras los rechazó asegurando que son unos "presupuestos inviables" por las condiciones de extrema austeridad que el Estado central condena a Cataluña. Aunque a su vez dijo tener "sintonía" con Artur Mas respecto al proceso soberanista, insistió en la convocatoria de elecciones plebiscitarias urgente. Sin embargo, esta posibilidad está bastante trabada. ERC condiciona la posibilidad de una lista unitaria con el único objetivo de alcanzar la independencia de Cataluña, que defina el camino y objetivos de cómo lograrla; algo que Artur Mas no está dispuesto a asumir.
Estamos entonces ante dos rupturas importantes: la del Gobierno central y el Ejecutivo catalán por un lado, y la posibilidad de una ruptura definitiva entre CiU y ERC.
Bajo este escenario político entra en juego el PSOE con su proyecto de Reforma Constitucional que los líderes territoriales debatirán el próximo domingo en Zaragoza en una reunión del Consejo Federal. Una reforma que pretende dar una salida intermedia entre la negativa del PP a encauzar la cuestión nacional y los partidos nacionalistas de Cataluña.
Sin embargo el líder del PSOE, Pedro Sánchez, respecto a la reforma constitucional ha anunciado que su partido debería tener mucha "prudencia" y llamó a pormenorizar su propuesta sobre la España federal. En la reunión de Zaragoza del domingo de la primera sesión del Consejo Territorial, los socialistas afirmaron que solo definirán el diagnóstico de cómo está el pacto constitucional, pero sin entrar en el detalle de cómo se reconocería la singularidad de Cataluña.
Entre los diferentes movimientos, el PSOE y PSC primero van a esperar a que Artur Mas convoque elecciones. Las condiciones, fecha y posibles alianzas que puedan darse para la formación de las candidaturas serán aspectos claves para la definición de la estrategia a seguir del PSOE.
A partir de ello, Miquel Iceta, líder del PSC, ha propuesto a CiU un "pacto estable de legislatura" eventualmente dando su apoyo a los Presupuestos catalanes del 2015; propuesta ya planteada el 16 de septiembre en el Parlament como socio estable a cambio de abandonar su hoja de ruta soberanista. La misma incluye cuatro cuestiones: creación de empleo y el relanzamiento de la economía; protección del Estado de Bienestar; regeneración democrática y la apertura de un marco de negociación con “el resto de España" para desbloquear el conflicto. Todas propuestas que pretenden llevar a que Artur Mas abandone definitivamente la posibilidad de convocar elecciones anticipadas y de carácter plebiscitario; tal como exige ERC.
Sin embargo, este juego laberíntico entre el Gobierno central y el ejecutivo catalán, y los diferentes partidos políticos, muestra la difícil situación que ha dejado la cuestión catalana después de los resultados del 9-N. La ruptura entre Rajoy y Mas no es más que la expresión de que la cuestión nacional de Cataluña no está teniendo ningún cauce ni rumbo.
En este marco, las propuestas del PSOE tampoco serán fáciles de llevar adelante. Por un lado, el PP no aceptaría de ninguna manera, como ya anunció, una reforma de la Constitución. Por el otro, aún CiU tiene que definir su hoja de ruta y los aliados con los que seguirla. Una pacto de legislatura con el PSC podría hacerle ganar tiempo, mientras encontraría en esta formación apoyo a los presupuestos del 2015.
El próximo lunes 24 Artur Mas anunciará su nueva hoja de ruta definida en base a la decisión. La misma dependerá de si opta por anticipar unas elecciones de carácter plebiscitario o no, cuáles serán de ahora en más sus aliados políticos, y por último, cómo desencalla la cuestión de los presupuestos de 2015. Estamos entonces en medio de una negociación convertida en un laberinto sin salida inmediata.