¡ABAJO LAS LEYES E INICIATIVAS HOMÓFOBAS Y ANTIABORTO!

Las últimas semanas, la Iglesia,en complicidad con el Estado, ha lanzado una fuerte iniciativa en contra de los derechos de las mujeres y la comunidad sexo diversa. Estas instituciones impulsaron diversas campañas de odio que criminalizan nuestros cuerpos. Esta ofensiva se consolida con la reciente creación y puesta en marcha dela “Comisión de la Familia y Desarrollo Humano” en el Senado – cuyo objetivo es luchar contra el aborto y la moda de los matrimonios homoparentales; en opinión del senador panista José María Martínez, quien preside esa comisión, “la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha ido demasiado lejos con sus determinaciones a favor de los derechos humanos de las parejas del mismo sexo y las mujeres.”

Dicha comisión, ya recibe 300 mil pesos mensuales para cumplir con sus objetivos y, además, cuenta con la participación de lxs senadores: Lisbeth Hernández del PRI, Adolfo Romero del PRD, Ninfa Salinas del PVEM y Martha Palafox del PT [2]. Sin embargo, estas no son ni las primeras, ni las únicas iniciativas presentadas por los partidos patronales del congreso que atentan contra las condiciones de vida delas mujeres, la diversidad sexual y el pueblo trabajador en nuestro país, tan sólo el año pasado, amparados en el Pacto por México, PRI, PAN y PRD aprobaron una serie de reformas estructurales que empeoraron aún más las condiciones de vida y trabajo.

Sus acciones hablan por ellxs: quienes dicen defender la vida son culpables de que cientos de mujeres mueran cada año por hemorragias, infecciones y perforaciones uterinas causadas por procedimientos clandestinos e ilegales; son también culpables de la violencia obstétrica y machista que viven a diario miles de mujeres pobres a causa de los deficientes sistemas de salud y planificación familiar. Aquellxs que se indignan ante las parejas y familias del mismo sexo, son los mismxs que ignoran los miles de casos de feminicidios y hacen caso omiso a las denuncias por discriminación, acoso y crímenes de odio cometidos en el país. Sus acciones hacen eco a sus intereses de clase y dejan una vez más de manifiesto, la alianza reaccionaria que existe entre la Iglesia católica y el Estado mexicano.

Ésta alianza avanzó en estos meses con la aprobación en el Congreso neoleonés de la iniciativa para “proteger la vida desde la concepción”, la cual busca criminalizar a las mujeres que deciden abortar, y que se suma a los ya 19 estados del país que han modificado sus constituciones para condenar y criminalizar a las mujeres que abortan -voluntaria e involuntariamente-. A su vez el pasado 10 de junio, las comisiones unidas de justicia, salud y equidad de género del Congreso de Guerrero aprobaron el dictamen que rechazó la iniciativa para despenalizar hasta las 12 semanas de gestación la interrupción del embarazo, además el pasado 19 de junio las cámaras de Diputados y de Senadores aprobaron una reforma a la Ley General en Materia de Delitos Electorales, con la cual los ministros de culto podrán “orientar” el voto de la gente, sin incurrir en violación esa la ley.

En los hechos: ni la legalización del aborto o el matrimonio homoparental obligan a ninguna persona a practicarlos, pero si permiten que aquellas que quieran o necesiten recurrir a la interrupción voluntaria del embarazo, puedan hacerlo sin arriesgar su salud o su vida en el procedimiento; también permite el reconocimiento legal de los derechos y obligaciones de las parejas del mismo sexo, así como el avance en la justa igualdad de derechos hacia las parejas heterosexuales. Mientras tanto la Iglesia presiona al Estado para que el aborto y los matrimonios homoparentales no se legalicen, y de esta manera imponer a todas las mujeres y miembros de la diversidad sexual una legislación sobre sus cuerpos y su sexualidad, con penas de hasta 35 años para las que decidan abortar o lo hagan espontáneamente, o bien la marginalidad legal y social de las parejas del mismo sexo. Pero sobre todo, condenan a las mujeres más pobres y de los sectores de trabajadoras a realizarse abortos de manera clandestina y a arriesgar su vida en el proceso.

En cuanto al debate, el PRD demuestra una vez más no estar de nuestro lado, al ser parte de la “Comisión de la Familia y Desarrollo Humano”, como otras veces ha votando las leyes antiaborto en estados como en Oaxaca. Por otro lado, AMLO yel MORENA están muy lejos de levantar nuestras demandas más básicas, pues ante el debate abierto, AMLO considera que los derechos de las mujeres deben ser consultados popularmente para que nos los otorguen, como si nuestros cuerpos fueran bienes públicos y nuestra decisión sobre ellos debiera estar subordinada a la opinión y prejuicios de la sociedad.

Desde Pan y Rosas en el Movimiento de lxs Trabajadorxs Socialistas consideramos que, las mujeres junto a la diversidad sexual y los trabajadores, debemos salir a movilizarnos contra la ofensiva de la Iglesia y el Estado, de manera independiente a los partidos en el congreso y sus instituciones. Es importante fortalecer acciones como la que recientemente impulsaron las compañeras del Pacto por la Vida, la Libertad y los Derechos de las Mujeres, en contra de la iniciativa que protege la vida desde la concepción en N.L; o las manifestaciones en rechazo a la Comisión de la familia y desarrollo humano en el Senado por parte de diferentes agrupaciones de la diversidad sexual.
Al mismo tiempo, creemos que es necesario impulsar una gran campaña nacional por aborto libre, gratuito en todo el país y por plenos derechos para la comunidad sexo diversa, que como primer paso conquiste el derecho al aborto en Guerrero porque de conquistarlo nos podría en mejores condiciones para seguir luchando por el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos en todo el país y por echar abajo todas las reformas y leyes antiaborto y homofóbicas.
Rumbo al 28 de junio Día del Orgullo LGBTTI convocamos a hacer un bloque combativo que se movilice por:

¡ABORTO, LIBRE Y GRATUITO, en todo el país!

¡Libertad inmediata a todas las mujeres presas por abortar!

¡PLENOS DERECHOS PARA LA COMUNIDAD SEXODIVERSA!

¡Disolución de la Comisión de la Familia y Desarrollo Social!

¡Alto a las leyes e iniciativas homofóbas y misóginas! ¡Respeto al derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y a quién amar! ¡No más crímenes de odio!

¡Conquistemos el matrimonio igualitario en todo el país!

¡Basta de violencia obstétrica! ¡No más feminicidios!