Crisis económica europea
Irlanda, el euro y la crisis económica internacional
26/11/2010
Los 16 ministros del Eurogrupo y los 27 representantes de la Unión Europea aprobaron un “rescate financiero” a Irlanda, que según trascendidos excedería los 100.000 millones de euros. La denominada “ayuda” sería financiada a través del mecanismo de estabilización financiera [1] incluido en el presupuesto comunitario, de la Facilidad Europea de Estabilidad Financiera [2] creada por los socios de la Eurozona además de préstamos que podrán ser negociados por estados miembros. En este caso también serán de la partida Suecia y Gran Bretaña que, aún estando fuera de la zona, tienen sus bancos altamente comprometidos en Irlanda. A cambio, la Comisión Europea, el FMI y el Banco Central Europeo, exigen al gobierno irlandés un ajuste draconiano que mediante recortes al salario mínimo, la seguridad social y la suba de impuestos, permita ahorrar 8.000 millones de euros en 2011 y 20.000 antes de 2014. Mediante estos mecanismos se persigue una reducción del exorbitante déficit fiscal del 32% del PBI a menos del 3% en los próximos cuatro años.
El anuncio que se produce en el contexto de una fuerte crisis económico financiera en Irlanda hecha pública al mismo tiempo en que todavía no terminaba de digerirse el fracaso de la reunión del G-20 en Seúl [3], se combinó con el comienzo de una fuerte crisis política en ese país que ayer alcanzó su máximo pico cuando un grupo de diputados oficialistas del partido liberal Fianna Fail pidió la renuncia del Primer Ministro, su “correligionario” Brian Cowen. Los recientes incidentes entre Corea del Norte y Corea del Sur (ver artículo), agregaron un ingrediente picante a la endeble situación económica mundial, al pánico generado por la crisis política y al riesgo de contagio de la crisis de Irlanda a Portugal y España, otros dos eslabones débiles de la cadena del euro. Por dos días consecutivos cayeron las bolsas a ambos lados del Atlántico.
Burbuja inmobiliaria, crisis y salvatajes bancarios
Irlanda integra el grupo de los países de la Eurozona denominados despectivamente PIIGS. Adoptó el euro como moneda en el año 1999, cuestión que al eliminar el riesgo cambiario, aceleró extraordinariamente el ingreso de capitales. Desde fines de la década Irlanda, al igual que España, creció por encima de la media europea y se fue convirtiendo en lo que hasta hace poco se conocía como el “Tigre Celta”. El “modelo” irlandés es parte de la división del trabajo que la creación de la zona euro estableció entre los países ricos como Alemania fundamentalmente, aunque también Francia, y los países periféricos del Eurogrupo. Sin embargo, a diferencia de España, Grecia o Portugal, Irlanda combinó una fuerte burbuja inmobiliaria basada en préstamos bancarios de muy baja calidad con características de paraíso fiscal. El impuesto a las sociedades más bajo de Europa (12,5%) y un mercado laboral más “flexible” que por ejemplo el de España, atrajo un nivel de inversiones de multinacionales con fuerte sesgo tecnológico. En Irlanda están radicadas nada menos que las sedes europeas de Google, Intel y Microsoft. Como el resto de los PIIGS, en Irlanda se desarrolló una burbuja inmobiliaria basada en préstamos bancarios de mala calidad que generaron un extraordinario boom de consumo durante la última década pero a diferencia de España, Grecia o Portugal, este proceso se combinó con fuertes inversiones tecnológicas que le permitieron ser un país más competitivo desde el punto de vista comercial. Estos dos aspectos hicieron coexistir dos sectores en la economía: por un lado un fuerte desarrollo tecnológico y de altas ganancias alimentado por las condiciones extremadamente favorables para las multinacionales y por el otro, un boom de consumo basado en una gran especulación financiera, asociada a préstamos basura, que se desarrollaba a través de los bancos irlandeses literalmente inundados por fondos provenientes en especial del Reino Unido, de Alemania y Francia. Por ejemplo en Irlanda se vivió un boom de venta de automóviles alemanes y su parque automotor es mucho más moderno que el de la propia Alemania. La conclusión no es muy novedosa: así como los bancos alemanes y franceses le prestaban a Grecia para que, entre otras cosas, comprara armas alemanas y francesas, los bancos alemanes proveían fondos a Irlanda para que los irlandeses consumieran autos alemanes.
Pero estos mecanismos se pincharon desde que la crisis inmobiliaria alcanzó su pico en el año 2007. Irlanda sufrió la mayor caída de los precios de la propiedad inmobiliaria de la zona euro, un desplome incluso mayor que el de España. Irlanda quedó presa de una profunda crisis bancaria. Las entidades más grandes como Allied Irish Bank (AIB) y Bank of Ireland tienen una fuerte participación estatal y una peligrosa relación entre préstamos y depósitos de alrededor del 160% [4]. El Anglo Irish Bank y el Irish Nationwide ya son totalmente de propiedad estatal. El histórico déficit fiscal irlandés que alcanza el 32% del PBI es el producto de los rescates bancarios. O mejor dicho, es producto del salvataje por parte del fisco irlandés de las entidades británicas, alemanas y francesas que luego de la fiesta de la última década tienen sus activos altamente comprometidos.
¿Rescate?... y crisis política
Pero aún todo esto no alcanza. Con una tasa de desempleo cercana al 15% y en medio de la deflación, la montaña de deudas de la economía irlandesa sigue siendo un foco de alto riesgo para Alemania, Francia y la “estabilidad” del euro como así también para Gran Bretaña. El llamado “rescate” del Eurogrupo, la Unión Europea y el FMI, que es en realidad un “autorescate” [5], exige ahora que Irlanda reduzca el déficit fiscal acumulado mediante…reducciones salariales, reducciones del seguro de desempleo y aumentos de impuestos. La indignación en la República de Irlanda es muy fuerte y la gran crisis política que estalló durante los últimos días es consecuencia de ello. Luego de recurrir al rescate a cambio de ajuste, el Primer ministro Brian Cowen se vio obligado a prometer una elección general anticipada para el próximo año. El liberal y oficialista partido Fianna Fail de Cowen es el partido más grande que gobierna con una ajustada mayoría que le proporciona el Partido Verde que anunció que abandonaría el gobierno. En el hasta ahora más agudo pico de la crisis, varios miembros del propio Fianna Fail pidieron la renuncia de Cowen. Sin embargo, ante el mensaje del FMI que encima pide “velocidad y estabilidad”, tanto el Fianna Fail como los propios ecologistas y el partido Fine Gael (demócrata-cristiano), antes de comenzar sus respectivas campañas electorales, darían apoyo al plan de ajuste para los próximos cuatros años así como a la votación del presupuesto. Aparentemente el único partido que se opondría al ajuste es el Sinn Fein (expresión política de la lucha nacional irlandesa) de escasa representación parlamentaria.
Tensiones en la eurozona y en la economía mundial
La crisis económica y política irlandesa aceleró los rumores y el miedo sobre un efecto contagio en la economía tanto de Portugal como de España. El riesgo país subió ayer al nivel más alto desde que España adoptó el euro como moneda. Es posible que el Fondo de Estabilidad Financiera aprobado en mayo, resulte insuficiente para un eventual “rescate” de España. Mientras Lisboa aparece como el próximo blanco de los mercados, Portugal vivió el día de ayer la primera huelga general en 22 años como respuesta al plan de ajuste del “socialista” José Sócrates que será votado el próximo viernes en el Parlamento. Mientras tanto el FMI y la Unión Europea le exigieron a Grecia que haga un “esfuerzo extra” para lograr bajar el déficit del año próximo y seguir recibiendo “ayuda” externa. Al tiempo que se desarrollaba en Grecia un paro general de los recolectores de basura y los marineros, se conoció que el país recibió la autorización para obtener el siguiente tramo del paquete de rescate a cambio de dos nuevas condiciones. En primer lugar el Estado se compromete a garantizar que por cada nuevo empleado estatal que contrate, habrá cinco empleados estatales jubilados y en segundo lugar, los sindicatos pequeños podrán negociar con los empresarios, salarios más bajos que los de convenio. En Londres, una nueva movilización estudiantil se enmarca en las decenas de protestas planificadas en toda Gran Bretaña contra los planes del gobierno conservador de elevar las tasas de las matrículas universitarias. Crisis profundas, planes de ajuste, gobiernos débiles y resistencia de las masas, traen a la memoria –más allá de todas las diferencias del caso- los álgidos sucesos del año 2001 en Argentina.
Al cóctel explosivo, mezcla de crisis económica, tensiones militares, ajustes, crisis política y entrada en escena de los trabajadores y sectores populares, se agrega que el euro viene cayendo en su valor frente al dólar, moneda que además se está refortaleciendo como reserva de valor. En esta carrera, aunque el euro peligra, Alemania gana competitividad. Mientras, la política de “relajamiento cuantitativo” [6] de la Reserva Federal Norteamericana que entre sus objetivos principales buscaba debilitar el valor del dólar para reducir el desequilibrio comercial, estaría fracasando casi antes de empezar. Los ritmos de la crisis económica mundial se están acelerando y es probable que estemos entrando en un nuevo episodio más agudo que los anteriores.
NOTASADICIONALES
[1] Mecanismo de rescate de hasta 750.000 millones de euros ideado por el FMI y la Unión Europea en mayo pasado al calor del estallido de la crisis en Grecia.
[2] La parte central del Mecanismo de Estabilidad Financiera que consta de un máximo de 440.000 millones de euros y capta fondos en el mercado con garantías individuales de los países de la zona euro para prestarlos a miembros en dificultades.
[3] Ver “¿Hacia un nuevo episodio de la crisis económica mundial?”, LVO N° 401.
[4] CincoDías.com
[5] Dinero que los países centrales europeos colocan en Irlanda para rescatar a sus propios bancos.
[6] Ver “¿Hacia un nuevo episodio de la crisis económica mundial?”, LVO N° 401.